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domingo, 26 de noviembre de 2017

Aprender a estudiar, aprender a vivir

 Muchas veces los profes nos enredamos en hermosos discursos sobre el valor del estudio. Hablamos de los aspectos positivos y de las consecuencias geniales que tiene estudiar. Los alumnos nos oyen como el que oye llover. Es una conversación que ya ha tenido lugar muchas veces y que discurre por caminos trillados. Hoy me propongo escribir de una manera más honesta sobre las dificultades a las que se enfrenta cualquiera que se ponga delante de un libro (o una partitura, o un problema matemático) con la intención de "estudiar".
La verdad es que estudiar es difícil, exigente. En absoluto consiste en sentir emociones positivas. No resulta sencillo dejar de lado lo que nos gusta para enfrentarnos a tareas complicadas y además experimentar una gran resistencia para entender y memorizar. No digo nada de estudiar para luego encima suspender. Estudiar puede ser una fuente de estrés y frustración importantes. Por eso muchos chavales renuncian a intentarlo.
Como profesora de instituto, una de las cosas que planteo a mis alumnos es si quieren realmente aprender o sólo desean aprobar.El deseo de aprobar a toda costa es muy común, vulgar. La transformación viene cuando surge la necesidad de aprender. 
El impulso de aprender viene de un lugar muy profundo de nuestro interior. Viene de un lugar en el que se ha superado la necesidad de "sentirse bien". Si lo que queremos es sentirnos bien en todo momento, continuaremos sin ponernos a estudiar. Para estudiar tenemos que romper con la idea de hacer siempre lo que nos gusta, de buscar a toda costa el placer y evitar el dolor. El impulso de aprender es el que nos da la valentía de responsabilizarnos de nuestra propia vida, a pesar del dolor que eso nos pueda causar.
No estoy diciendo que estudiar no sea a veces muy hermoso e incluso placentero. Las experiencias de aprendizaje pueden ser maravillosas pero es importante señalar que su objetivo no es proporcionarnos más felicidad sino la sensación de estar más allá de la necesidad básica de hacer "lo que me gusta" para encontrar eso que llamamos propósito.

¿Quién soy realmente yo?, ¿cuál es mi potencial?, ¿a qué me puedo dedicar?, ¿qué me gustaría ser?. A lo largo de la vida estas preguntas nos asaltan una y otra vez y sólo un espacio personal de aprendizaje continuado nos proporciona respuestas. El que sea valiente que me siga.
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 Destaco tres frases maravillosas de los comentarios. David Sanz habla de "sentir lo que estás estudiando". Aya El Makhloufi habla de un esfuerzo compartido, "el esfuerzo del alumno y del profesor". Esther Fernández se pregunta si los contenidos tienen que ser tan memorísticos. El debate está servido. Gracias por participar. Sois muy listos.

18 comentarios:

  1. Hola, soy Claudia Escudero, una alumna de 2ºB, y creo que no podría estar más de acuerdo, desde mi punto de vista como alumna creo que entiendes bastante bien la versión de “lo que estudiar “ para nosotros, los pupilos. Al contrario de muchos profesores, tu compartes la idea de que estudiar no es solo sentarse frente a un libro y leerlo.

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  2. Querida Claudia: es muy interesante la conclusión a la que llegas. Sentarse frente al libro no es ni siquiera el comienzo, y desde luego no es el final. El comienzo es cuando una lucecita se enciende en el corazón de vosotros, "pupilos" como dices. Un vocablo latino que se emplea para nombrar a un niño o joven respecto a su maestro. Me encanta esa palabra y me parece que el cambio interior empieza en la clase misma, en el pupilo que te escucha. como tú hoy. Un abrazo preciosa.

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  3. Hola, soy Alfonso de 2° de la ESO B, estoy muy de acuerdo contigo y con mi compañera Claudia. Pero yo creo que eres de las esas profesoras que comprendes a los alumnos y quieras que no, por lo menos a mí me gusta que me profesores nos comprendan y nos ayuden porque pocos profesores te ayudan o te dan pautas para estudiar, es verdad que ya deberíamos saber estudiar pero si por cualquier motivo a alguien le cuesta una asignatura deberíamos poder contar con una profesora como tú que nos ayudará sin compromiso. Y sin más que añadir gracias por tu manera y personalidad de dar las clases y de ayudarnos.

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  4. Siento los fallos gramaticales, ha sido el autocorrector

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  5. Muchas gracias por tu comentario, Alfonso. Me interesa lo que dices en la cuarta línea "es verdad que ya deberíamos saber estudiar". Pues mira Alfonso, eso es verdad...o no...dependiendo de la asignatura, del momento, de los conocimientos previos de cada uno, de las oportunidades que tenga en casa. A estudiar se aprende, igual que se aprende a prestar atención. Yo no sabía estudiar a los trece años, y uno va descubriendo poco a poco cómo se hace. De hecho, tus palabras y las de Claudia me animan a poner en práctica una idea que me ronda desde hace tiempo: publicar breves entradas con consejos para estudiar. Seguro que tú me puedes ayudar. Finalmente, que sepas que también yo te doy las gracias por tu personalidad y por tu forma de colaborar en mis clases. Un beso

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  8. Hola soy yasmine de 2°B
    Eso que dices de que si en verdad queremos aprender o aprobar me parece que por una parte aprobar y por la otra aprender.Yo creo que aprovar pq es en lo que pensamos al ver el examen corregido. Y aprender porque queremos saber y entender de lo que nos habla la profe cuando explica y al hacer el examen saber lo que escribes no sólo memorizar lo que pone en el libro.
    Porque a mí me parece que no sirve de nada aprovar si no aprendes porque si no aprendes no saves de que va o que finalidad tiene el trabajo al que te vas a dedicar de mayor.

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  9. Es un comentario magnífico, Yasmine. Al hacer un examen, tienes que "saber lo que escribes, no sólo memorizar lo que pone en el libro". No sirve de nada aprobar si uno no ha aprendido algo nuevo. Y lo que yo llamaba propósito tú lo llamas finalidad. Muy correcto. Recuerda, eso sí, que ¡se aprueba con b! Mil besos preciosa.

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  10. Aprendiendo se estudia y estudiando se aprende.
    El libro de texto de cada asignatura es importante ya que tiene todos los conocimientos que te tienes que asimilar, pero el hecho de memorizar leyendo o haciendo resúmenes no es muy eficaz a largo plazo.
    Si te soy sincera muchas de las cosas que estudié el año pasado no me acuerdo muy bien o directamente no me acuerdo, y creo que eso se debe a cuando estudiamos, a veces no lo comprendemos, simplemente lo memorizamos para poder sacar una buena nota en el examen y así poder aprobar la evaluación.
    Creo que una manera de que comprendiésemos mejor las asignaturas y que,a resultado de esto aprobemos con buena nota sería fomentar las actividades que se salgan del ámbito de dar teoría siguiendo las pautas de los libros de texto. Por ejemplo, cuando haces una visita guiada en alguna ciudad y te hablan sobre la historia de dicho país, sobre la Guerra Mundial…etc. se te queda la mayoría de las cosas que el guía te cuenta en la cabeza porque es una manera de aprender de una forma divertida y amena y además le estás poniendo interés; ahí estás aprendiendo.
    Entonces una de mis propuestas es que se dieran las clases (en general) de una manera más práctica.
    María López Llanos 3ºA

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  11. Muy de acuerdo en todo, María. Mira, a mí esta actividad del blog me parece por ejemplo que es muy formativa, sobre todo porque también aprendo mucho yo. Quizá el error consista en no convertir al alumno en profesor: profesor de sí mismo, de sus compañeros, del adulto que tiene delante. Muchísimas gracias por ponerme en la pista. En cuanto a las actividades prácticas también llevas mucha razón. Espero poder llevaros a un concierto muy pronto. Un fuerte abrazo.

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  12. Tu opinión me parece muy acertada,ya que muchos alumnos incluyendome a mi nos aprendemos algunas cosas de memoria simplemente para aprobar,y eso no debe ser así,ya que si no comprendemos la información lo único que logramos es retener la información el tiempo justo para examinarnos y aprobar.
    pero también pienso que hay asignaturas de las que no deberíamos ser examinados,es decir,hay cosas que para el dia de mañana no les resultan útiles a todo el mundo,eso depende mucho de lo que quieres ser de mayor,si por ejemplo en mi caso quieres estudiar una ingeniería de robótica las mates y es ingles son claves,pero si queres ser arqueólogo las ciencias sociales con muy importantes,y si quieres ser biologo la biología te sera muy útil al dia de mañana,pero a lo que voy es que para especializ<rnos en lo que queremos ser de mayor tendremos que estudiar una carrera especifica y a la persona que estudie biologia no le habrá servido de mucho estudiarse como era el paleolítico,neolítico... y así con diversas carreras,por eso en mi opinión quitando matemáticas,lengua e ingles que son imprescindibles para nuestro futuro las demás asignaturas se deberían dar,pero en forma de historias para que nos acordemos de lo que nos dicen al dia de mañana como "datos extra de conocimientos" pero no creo que debamos estudiarlo de memoria porque si hay personas que no les gusta la biologia tendran que memorizar,examinarse y olvidar.En cambio podrían acordarse de las"historias" que decía el profesor y acordarse,porque para saberse los contenidos de biología,historia,literatura etc,ya lo hará la persona que quiera dedicarse a eso.
    Esa es mi opinión.

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  13. Esta reflexión esta muy bien , pues creo que hay muchas personas que les pasa lo que dices , en mi punto de vista estudiar no es solo sentarse frente a un libro , para estudiar se necesitan ganas , si te sientas y empiezas a leer,solo porque es tu obligación y quieres aprobar no te servirá de nada es más creo que con esa actitud solo se suspenderá. Pero también es difícil ponerse a leer con ganas .Antes de ponerse a estudiar hay que pensar porque lo hacemos y para que nos servirá.
    Es verdad que también influye un poco la manera de enseñar de los profesores, pues también se aprende jugando , haciendo excursiones , haciendo concursos ..... etcétera. Y es ahí donde los alumnos se van a interesar mucho más por la asignatura.
    Por eso en cierto modo es importante el esfuerzo del alumno y del profesor a la hora de enseñar ya que hay que tener un buen método y que el alumno se sienta cómodo.
    AYA EL MAKHLOUFI 3·B

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  14. Cecilia, soy compañera de profesión, sólo decirte los alumnos tan maravillosos que tienes. Reflexionan con una profundidad increible y acertada. Ojalá muchos profesores aprendieramos de ellos, de su forma de pensar y al aprender, les ayudaramos mejor en su proceso de enseñaza-aprendizaje. Me das envidia por tus alumnos. Enhorabuena a todos.

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  15. Hola Cecilia soy David Sanz de 3°C . Estoy de acuerdo contigo porque estudiar no es ponerse delante de un libro y leerse lo tres veces para memorizar el contenido , es ponerse y entender más bien yo creo que es sentir lo que estás estudiando , por mucho que uno estudie si no lo entiende sabrá menos que uno que si entiende y se lo sabe.
    Otras de las preguntas que nos asaltan es para que sirven cada asignatura yo creo que eso es el principio , entender para que sirve una asignatura. Es verdad que estudiar y de jardín al lado las cosas que te gusten no es fácil pero el sacrificio trae sus recompensas, a veces no pero a los que no se las traigan os animo a seguir intentándolo porque al final obtendréis resultado y no olvidéis, el que sea valiente que nos siga.

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  16. Hola de nuevo: destaco tres frases maravillosas de los comentarios anteriores. David Sanz habla de "sentir lo que estás estudiando". Aya El Makhloufi habla de un esfuerzo compartido, "el esfuerzo del alumno y del profesor". Esther Fernández se pregunta si los contenidos tienen que ser tan memorísticos. El debate está servido. Gracias por participar. Sois muy listos.

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  17. Hola Cecilia,

    Soy Reme.

    Aprovecho tu blog para desearte a ti y a todos en el instituto, que paséis una ¡¡ MUY FELIZ NAVIDAD !!, en compañía de vuestros seres más queridos, y también todo lo mejor para este NUEVO AÑO !!

    Un fuerte abrazo,

    Reme

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