Muy buena la charla, si señor. Oímos, pero la mayor parte del tiempo no escuchamos. Cuántas conflictos y malentendidos se resolverían o evitarían si de verdad fuéramos con un actitud de escucha activa y consciente, en lugar de estar deseando que la otra parte termine de hablar para expresar nuestra opinión. Y para nuestros alumnos, en las aulas, cuánto se facilitaría el aprendizaje y la convivencia si hubiera más silencios y más escucha. Vivimos en una época y en una sociedad rodeada de demasiado ruido, siendo el más molesto y sonoro el de nuestra propia cabeza. De nuevo el mindfulness puede ser una estupenda herramienta para encontrar esa quietud interior que nos ayude a ESCUCHAR más y mejor.
De nuevo la visión inteligente y profunda de Verónica ilumina las palabras de Julian Treasure y las dota de nuevos significados. Gracias, amiga.Cecilia
La dificultad de aislar el ruido del sonido ha sido una práctica estupenda esta mañana. Muchas veces las dificultad en 'ordenar y distinguir' lo que queremos oír y separar los ruidos que distraen la atención pueden parecer insalvables. Ruidos de todo tipo, los peores, los internos.
Trabajé un curso en un instituto que tenía alumnos hipoacústicos y en una pared habia un cartel que decía : Escucha el Silencio. Para mi desilusión fue imposible pero ni en aquel instituto, ni en ninguno y lo peor, ni en mi casa. Lo que hago a veces es cerrar los ojos y catalogar cada uno. Ya que están ahí por lo menos que estén "ordenados". Un saludo
Muy buena la charla, si señor. Oímos, pero la mayor parte del tiempo no escuchamos. Cuántas conflictos y malentendidos se resolverían o evitarían si de verdad fuéramos con un actitud de escucha activa y consciente, en lugar de estar deseando que la otra parte termine de hablar para expresar nuestra opinión. Y para nuestros alumnos, en las aulas, cuánto se facilitaría el aprendizaje y la convivencia si hubiera más silencios y más escucha. Vivimos en una época y en una sociedad rodeada de demasiado ruido, siendo el más molesto y sonoro el de nuestra propia cabeza. De nuevo el mindfulness puede ser una estupenda herramienta para encontrar esa quietud interior que nos ayude a ESCUCHAR más y mejor.
ResponderEliminarDe nuevo la visión inteligente y profunda de Verónica ilumina las palabras de Julian Treasure y las dota de nuevos significados. Gracias, amiga.Cecilia
ResponderEliminarLa dificultad de aislar el ruido del sonido ha sido una práctica estupenda esta mañana.
ResponderEliminarMuchas veces las dificultad en 'ordenar y distinguir' lo que queremos oír y separar los ruidos que distraen la atención pueden parecer insalvables. Ruidos de todo tipo, los peores, los internos.
Una maravilla contar con un director que practica yoga y mindfulness y además lo difunde. Gracias.
ResponderEliminarTrabajé un curso en un instituto que tenía alumnos hipoacústicos y en una pared habia un cartel que decía : Escucha el Silencio. Para mi desilusión fue imposible pero ni en aquel instituto, ni en ninguno y lo peor, ni en mi casa. Lo que hago a veces es cerrar los ojos y catalogar cada uno. Ya que están ahí por lo menos que estén "ordenados". Un saludo
ResponderEliminarQué comentario más inteligente!!! Muchas gracias Lola.
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