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domingo, 14 de marzo de 2021

G DE GENIO, DICCIONARIO DE MÚSICA Y EMOCIONES.

 En los cuentos infantiles, un genio aparecía salido de una lámpara para conceder a los mortales toda clase de deseos. Si buscamos en un diccionario, genio o genial es una persona dotada de una capacidad mental extraordinaria para crear o inventar cosas nuevas y admirables, para ver posibilidades creativas que la mayoría no percibe (1). Ingenio o ingeniero son palabras de la misma raíz. En francés se dice génie, en alemán genius. En inglés se usa la palabra "gifted" (de gift, regalo) para referirse a esas personas de inteligencia fuera de lo común. Si nos fijamos, en todos estos idiomas aparece el componente de obsequio al referirnos a los triunfadores. El talento sería algo así como una merced concedida a unos privilegiados que lo único que tienen que hacer es ponerse a escribir música para obtener composiciones magistrales, o agarrar una raqueta para ganar torneos.

A menudo he observado en clase que esta manera de entender las habilidades propias y de los demás es, para muchos alumnos, una trampa mortal. "No se me da bien", aseguran ante la materia suspensa, ante el fracaso en un ejercicio, ante la debilidad y desfallecimiento que inevitablemente aparecen cuando una empresa es difícil. Pero ahí tenemos la famosa frase atribuida al gran escultor Miguel Ángel: "si la gente supiera lo duro que tengo que trabajar para ganar mi maestría , no lo encontraría maravilloso en absoluto".

La música, campo que conozco bien, tiene un nivel de exigencia altísimo. Componer o tocar un instrumento son habilidades que sólo se obtienen tras cientos de horas de entrenamiento. Cierto es que hay personas a las que parece que se les da mejor que a otras. Pero no lo es menos que la persistencia es un elemento clave el desarrollo de cualquier destreza. 







Beethoven comienza la quinta sinfonía con tres notas cortas y una larga. Durante todo el primer movimiento se dedica a esta idea que, seamos francos, desde un punto de vista melódico es muy pobre. Sin embargo, es una de las obras musicales más famosas de todos los tiempos. El vigor, la energía, el interés que comunica al oyente no decaen en ningún momento. Beethoven no se detiene a pensar que las melodías "no se le dan bien" o que la idea no es brillante. La explora sin complejos hasta el final, que termina exactamente como ha empezado (ta ta ta taaaaa)  y nos deja anonadados. A menudo confundimos talento con perseverancia, suerte con insistencia, fortuna con fuerza de voluntad. Las personas talentosas son sin excepción trabajadoras, insistentes, animosas, valientes. Al afirmar que el talento es un regalo, nos olvidamos de lo más importante, que ese regalo nos lo podemos hacer nosotros mismos. Cuando en una junta de evaluación veo el expediente brillante de algunos alumnos, no puedo evitar pensar en lo duro que han trabajado para obtener esos resultados. ¿Geniales? Sin duda. El genio de la lámpara les ha visitado, tras horas de esfuerzo y sacrificio.

"Para ser un grande del flamenco hay que tener disciplina. A no ser que sólo quieras dar alguna pataíta en algún cumpleaños" Manuel Jiménez "Bartolo" -bailaor- a su alumno Miguel Fernández "El Yiyo" (2)

(1) En R. Soca, El origen de las palabras, Rey Naranjo Ed., 2018.

(2) En Harper´s Bazaar, Nº 126, pág 175, Marzo 2021.

6 comentarios:

  1. Buenos días, Cecilia. Soy Teresa Montesino, de 3ºB.
    No había podido escribir en varias entradas porque las clases y otras tareas me estaban quitando demasiado tiempo, así que no encuentro una manera mejor de volver que hablando del esfuerzo y de lo que una persona necesita para convertirse en un verdadero genio.
    Sé por experiencia que ser bueno en algo es difícil, muy difícil, y podemos pasar mucho tiempo intentándolo hasta poder lograrlo. Algunos tal vez nacen con un "don" para ciertas cosas, algo que parece que se les da bien por naturaleza. Tal vez lo veamos así, pero no siempre es cierto. Muchas veces, detrás de ese "don" hay un esfuerzo muy grande por detrás que nosotros no vemos.
    Puede que se nos de bien algo, pero para ser bueno en eso, para conservar nuestro potencial en esa cosa, necesitamos entrenarnos. Es decir, puede que un futbolista, por ejemplo, sea muy bueno jugando al fútbol. Puede parecer que tiene un don, podemos pensar que él tiene algo que nosotros por mucho que queramos nunca tendremos. Pero, a veces, las apariencias engañan. Para ser tan bueno ese futbolista tiene que estar todos los días entrenando durante muchas horas, hacen un gran esfuerzo para ser tan buenos.
    Lo mismo pasa con los estudios. Veo a mis compañeros alucinar cuando alguien ha sacado un diez. Siempre dicen: ¡¿Pero cómo lo haces?! La respuesta a esa pregunta es más sencilla de lo que creen: trabajando. En vez de estudiar una hora, estudian dos. En vez de salir todos los viernes con sus amigos, algunos se quedan en casa porque no se conforman con aprobar, no, ellos quieren el diez, la excelencia.
    También están esas personas que no entienden para qué se necesita estudiar tanto cuando simplemente con aprobar nos sirve. Habrá muchos motivos por los que la gente estudia mucho, por los que siempre va a por el diez, aunque el mio es muy simple: lo hago por mí. Ver mi nota suele reflejar el trabajo que he hecho, y que el sacrificio mereció la pena, no solo para sacar una buena nota, sino para seguir mejorando y tener un futuro brillante.
    Cuando he leído lo que habías escrito, me ha llamado la atención el párrafo donde has hablado de los alumnos que se excusan diciendo: No se me da bien. Creo que todos hemos dicho eso bastantes veces. Y, puede que sea cierto, puede que algo no sea tu fuerte, que tengas más complicaciones para entenderlo pero, al igual que entrenamos nuestras fortalezas, también debemos mejorar nuestras debilidades. Debemos prestarle más atención a las cosas que no se nos dan bien, a las que nos cuestan por naturaleza, para así no dejarlas atrás, así que el decir que "no se me da bien", no es una opción.
    Creo que me he alargado bastante, así que me despido ya, pero antes... No sé si alguna vez habéis oído esta frase, pero a mí me ha ayudado muchas veces a seguir adelante y esforzarme al máximo: Fight until the end (lucha hasta el final).

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  3. Hola Cecilia, soy Mª Isabel Alcántara Brito de 2ºB
    El mensaje que transmites con tu texto es muy inspirador .
    A lo largo de la vida siempre , pensamos que somos inútiles para algo diciendo que no tenemos el don para hacerlo o la inteligencia suficiente, cuando en realidad no es así.
    Una de las cosas que caracteriza a los seres humanos es esa capacidad de tener o desarrollar algo con lo que pueda dejar huella a lo largo de su historia.
    Todos tenemos miles de virtudes con las cuales cambiamos a diario el mundo.
    Los seres humanos siempre actuamos por el corazón y nos esforzamos más en lo que nos gusta porque deseamos que esa virtud llegue a los más alto y una vez que lo conseguimos somos capaces de poder ganar todos los retos que se nos presentan a diario.
    Nos podemos equivocar o no entender muchas cosas pero somos capaces de reflejar el gran corazón que llevamos dentro .
    Para mi los verdaderos genios, son aquellos que se esfuerzan para poder llegar a conseguir su objetivo , esas personas que luchan por lo que quieren .

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  5. Qué bonito lo que escribes, Isabel.Estoy de acuerdo contigo en que las personas que luchan por lo que quieren son las verdaderamente geniales.

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  6. Buenas cecilia soy Óscar Tablero Platas de 3°B. Siento no haber escrito antes. Esta entrada te hace reflexionar y lo primero que te tienes que plantear es que no todos somos iguales, no todos nos gusta lo mismo y a ninguno se nos da bien las mismas cosas porque cada uno tienen sus propios gustos bien porque se nos de bien y nos guste o porque sea la unión que tienes con eso. Entonces básicamente se podría decir que todos somos genios lo que pasa que no en la misma cosa. Esto es un error que remediar ya que desde siempre hemos pensado que una persona es inteligente si saca un 10 en matemáticas y sabe de resolver ecuaciones difíciles pero como he dicho antes esto no es así cada uno tiene su propio territorio donde él mismo es el genio porque se la bien ya se que a veces es difícil pensarlo ya que somos muy negativos y nos memospreciamos pero hay que arreglar este error que llevamos pensando desde siempre. Una vez me dijeron que no importa tanto el saber sino hacer lo que uno le gusta ya que en esos todos somos expertos. Ahora bien esto no quiere decir que todo el rato sea fácil porque como dice el refrán el que algo quiere algo le cuesta, pero vale la pena ya que no es lo mismo trabajar en una cosa que no te gusta y amargarte que trabajar en la que te gusta y disfrutar y hacerlo con ganas y bien. Así que el consejo o moraleja que podemos sacar de aquí es que debemos luchar/ trabajar para llegar a la cima (lo que nos gusta) y disfrutar ya que la vida son dos días.
    Un saludo y gracias por todo.

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