💛HOLA DE NUEVO,💛
Esta tercera semana vamos a respirar desde la plena conciencia del movimiento propio. ¿Por qué? Muy a menudo nos ponemos con tareas "intelectuales" (deberes, memorización, ordenador) y al cabo de un rato nos invade la sensación de agotamiento. Nos parece que no somos capaces y lo que realmente ocurre es que nos hemos cansado de la postura adoptada, nuestra vista se resiente, nos duele el cuello y nos falta oxígeno. Sin darnos cuenta, nos hemos olvidado otra vez de dar a esta maravillosa máquina que es nuestro cuerpo lo que realmente necesita. ¿Qué tal unos estiramientos de vez en cuando? Os explico cómo se hace.
Esta imagen, extraída de los apuntes de Leonardo da Vinci, representa la perfección del cuerpo humano en diferentes posiciones pero siempre centrada, inserta en un círculo y en un cuadrado.
- El ejercio comienza en una posición parecida a la de la imagen, pies separados a la altura de las caderas, paralelos, espalda erguida, mirada al frente.
- Inspira y levanta los brazos hacia los lados con lentitud, sube un poco más, hasta que estén encima de la cabeza. Empuja un momento las puntas de los dedos hacia arriba. No te olvides de respirar. Ya puedes bajarlos de nuevo. Los movimientos tienen que ser lentos pero firmes. Haz el ejercicio tres veces. Puede servirte contar hasta ocho (arriba) y hasta ocho (abajo).
- A continuación imagina que tratas de coger un objeto que no está a tu alcance. Estira lentamente un brazo despegando del suelo el talón contrario. Muy bien. Ahora, del otro lado. Respira. Puedes hacerlo tres veces a cada lado.
- Flexiones laterales: coloca las manos en las caderas y dobla el cuerpo ligeramente a un lado. Muy bien. Ahora al otro, genial. Hazlo tres veces a cada lado. Mirada al frente. ¿Tienes una ventana que te permita ver el exterior? Descansa también la mirada.
- Por último, rota los hombros hacia delante y con suavidad. Deja que la respiración determine la velocidad de las rotaciones.
Hola Cecilia, soy Nerea Díaz García, alumna de 2ºA.
ResponderEliminarEl control de tu cuerpo es importantísimo en el día a día, no solo para realizar tareas, sino también para concentrarte y sentirte relajado, o simplemente agusto contigo mismo en ese instante de paz y tranquilidad.
En muchas ocasiones me pasa lo que tu comentas, me siento cansada y me empiezo a aburrir cuando estudio, por lo que soy incapaz de concentrarme. Así que tengo que realizar algunas técnicas de relajación y concentración porque si no soy incapaz de estudiar o hacer otras cosas ya que me estreso, por lo que las técnicas que estás proponiendo me vienen muy bien.
Las dos semanas anteriores he estado enfocando las técnicas que tú has propuesto a los estudios, pero esta semana no he hecho lo mismo, simplemente he realizado los pasos que has propuesto porque quería experimentar nuevas sensaciones y también tener un momento de relajación, lo que lleva a la felicidad y paz con uno mismo.
Al acabar de realizar el último paso, he examinado mi cuerpo: como me sentía, que sensaciones notaba, si sentía algo extraño… No sentía nada raro, ningún dolor ni malestar, al contrario, me sentía aliviada, porque sentía que me había quitado como una especie de peso de encima, el estrés (quizá no todo, pero si gran parte de él).
Lo último que he hecho ha sido sonreír, como “La Gioconda” .
Finalmente, comentar que casi no he acabado de realizar los pasos de esta semana y ya estoy impaciente por ver cuáles son los de la siguiente.
Un saludo, Nerea.
Hola Cecilia, soy Isabel Castellano Becerra de 2°A eso.
ResponderEliminarEsta sesión me ha encantado. Acabo de realizar estos ejercicios y ahora me encuentro más relajada. Yo no he realizado esta sesión para concentrarme en las tareas, la he utilizado para relajarme, quitarme el estrés, y todas esas tensiones del cuerpo. Es curioso lo que he experimentado, al mismo tiempo que realizaba estos pasos también he hecho los indicados las dos semanas anteriores. A la vez que relajaba mi cuerpo, también notaba como se encontraba en ese momento, y los pensamientos que venian y se iban de mi cabeza. En estas semanas me estoy dando cuenta que el respirar, no es solo coger aire y soltarlo para vivir, me doy cuenta que es mucho más que eso. La sensación que he tenido ha sido fantástica. He controlado mi cuerpo, no me he concentrado en un solo pensamiento, solo en el aquí y ahora.
Finalmente he sonreido, como "La Gioconda"
Para terminar, he de decir que me siguen encantando los pasos que propones cada semana, y que espero impaciente los siguientes.
Un saludo, Isabel.
Hola Cecilia. Lo primero decirte que soy súperfan de tus alumnas (bueno, y tuya también, jejeje). Pero, en serio, me sorprende mucho que con estas edades se expresen tan bien y profundicen así en sus emociones. Por otra parte, también me llama la atención que gente tan joven sienta estrés y sea consciente de ello, me da qué pensar sobre la sociedad en que vivimos.
ResponderEliminarCentrándome en el tema que planteas para esta semana, he de decir que hoy unas cuantas profesoras del proyecto hemos tenido el privilegio de practicar tu propuesta de manos de toda una profesional como es Teresa y ha sido un lujo. Nos ha planteado una sesión de estiramientos y relajación que ha sido un oasis en mitad de la mañana. Y es que ser consciente de nuestro cuerpo, de nuestra respiración, de las tensiones que podamos notar, estirarlo y relajarlo, es algo tan agradable y tan fácil, pero que hacemos tan poco. Se merece que lo mimemos y, además, es muy agradecido, pero no solemos encontrar el momento. Así que te agradezco a ti por motivarnos a dedicarle un ratito a nuestro cuerpo y a Teresa por guiarnos en la práctica tan amorosamente.
Hola Cecilia:
ResponderEliminarLa sesión de Teresa (que ha seguido la propuesta de Cecilia y ha ido más allá porque es una profesional extraordinaria y sabe hacerlo extraordinariamente bien) ha sido un regalo y un privilegio. Es necesario dedicar tiempo y energía a cuidar "lo que somos" y "el que somos", a que respire, se estire, crezca, se nutra (no sólo que coma). Los beneficios son muchísimos y muy eficientes mejorando la sensación de bienestar.
UN COMENTARIO DE JULIA RUBIO ROLDÁN, ORIENTADORA DEL CENTRO
EliminarHola Cecilia. Soy Francisco. Los ejercicios propuestos esta semana son muy interesantes. Parece una tarea muy sencilla compaginar respiración y movimiento, es decir, ser consciente de nuestra respiración y, a la vez, llevar a cabo ciertos movimientos básicos con nuestro cuerpo, pero, habitualmente, no lo practicamos. Pues ¡vamos a por ello!
ResponderEliminarSi conseguimos esto, estaremos en el camino de alcanzar logros más importantes, como el control de nuestras emociones y, así, evitar el estrés y la ansiedad, tan comunes en los últimos tiempos.
UN COMENTARIO DE FRANCISCO CAMPOS ALCALDE, PROFESOR DE HISTORIA
EliminarLa primera imagen que me viene al leer la propuesta de esta semana es de gente practicando taichi. Hace años tuve la gran suerte de disfrutar viajando por China y Vietnam y una de las cosas que más me sorprendieron es la gran agilidad y tranquilidad que tenían los asiáticos y sobre todo las personas mayores. Durante todo el día pero principalmente a primera hora de la mañana se reúnen multitud de grupos en parques o cualquier otro sitio a practicar taichi y/o realizar estiramientos con una armonia envidiable. Por suerte es algo que han “exportado” y hoy en día es algo que no muy lejos de nosotros es fácil de encontrar. Pero no hace falta irse a algo tan sofisticado, simplemente una sencilla sesión de estiramientos puede aportarnos la energía necesaria para enfocar el día o simplemente disfrutar de ellos, que es la propuesta de esta semana. Llevándolo al plano más académico creo haber leído en los currículos de los paises que mejores resultados obtienen en los informes educativos que las sesiones diarias de clases no suelen ser de más de 45’ y suelen realizar descansos cortos (5’-10’) cada par de sesiones para realizar estiramientos o ejercicios físicos. Así que ya sabes, A respirar y A Estirar!!!
ResponderEliminarHola Cecilia. Hola, alumnos y compañeros. Soy Carlos, profe de Matemáticas.
ResponderEliminarEsta entrada es de momento la que más "currada" tengo de base ya que desde hace años realizo estiramientos y ejercicios leves, especialmente para cuidar las partes de mi cuerpo que suelen acabar más castigadas por el día a día (en mi caso, cervicales y lumbares). La lentitud deliberada del ejercicio, llegar a depurar la técnica al realizarlo, pueden convertirlo en un rato del día muy relajante. A veces lo combino con un poco de música suave o con suaves ejercicios de respiración.
Como bien dice Carlos de Educación Física, la práctica del taichi y actividades similares tan extendida en Oriente nos enseña que para mantener cuidado nuestro cuerpo y llegar en un estado activo a los años de madurez, tenemos mucho que aprender de los asiáticos. Quizás va siendo hora de que en Europa empecemos a tomarnos en serio e incluyamos en nuestro día a día estas prácticas tan beneficiosas para la salud a largo plazo. Me alegra decir que ya se ve en muchos parques de España (en el mismo Alcorcón, el Parque de la Paz o "El Caura" como le llamamos los alcorconeros suele reunir a muchos mayores practicando). Pasito a paso...
Y por supuesto, ¡importantísimo sonreír! :-)
Un saludo a todos.
Hola, Soy Ana Muñoz ( de Mates) : ¡Que envidia me dais todos...! Yo hace años hacía más deporte con regularidad que ahora. Y he tenido rachas de estar muy sedentaria, he notado muchísimo la falta de ejercicio e incluso la ausencia de estiramientos. Cada vez lo echo más de menos y he entendido perfectamente la sensación de rigidez y de tensión que se describe en la entrada y que a veces se acumula por falta de tener una buena postura y una buena respiración.Estoy procurando cuidar más ese aspecto del físico. Cierto: dedicando cada día unos minutos en casa a relajar y estirar se pueden conseguir maravillas.Ahora de manera más consciente y regular voy a continuar haciendo estos pequeños estiramiento que son tan eficaces y aportan tanto bienestar. Muchas gracias a todos.
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